LA JUGADA DE AJEDREZ DE FICHA LIMPIA LE PUEDE COSTAR LA CREDIBILIDAD A JAVIER MILEI Y ALGUNOS DICEN HASTA SU FUTURO POLÌICO

Es bueno negociar en la política?  Podríamos decir que no ya que los políticos son representantes del pueblo y tendrían que velar por los intereses de todos pero vemos una vez más que todos terminan  siendo parte de lo que critican.

El Presidente  Javier Milei fue crítico de las formas de la política, de los negociados en el Congreso, a punto de decir barbaridades en foma genérica como también lo ha hecho del periodismo en general y de la  televisión.

El se hace conocer en televisión y en el fondo muchos pensamos que podría ser un poco más agradecido independientemente que  en algún momento lo hayan querido borrar de la tele y gente como Fantino pudo bancarlo.

En su discurso  fue  muy duro  contra el kirchnerismo en su totalidad, no diferenciando gente que vale la pena y  a aquellos que no han hecho  las cosas bien o han sido corruptos, pero nuevamente englobar a todos no es bueno.

En esta semana vivimos el tema FICHA LIMPIA que era convertir en ley un proyecto que impediría que aquellos que estén con condena firme no puedan acceder a cargos públicos.

Imaginarse por un momento aquel que está preso por el  robo de gallinas mientras aquellos que robaron millones y  siguen encima cobrando jubilaciones de privilegio no solamente andan como si nada sino también pretenden un cargo público.

Y que  está viendo la gente, solamente que el Congreso que lo mínimo que tendría que hacer es que todos estén presentes para tratar todas las leyes que se propongan usan el faltazo como mecanismo para dar quorum y esto involucra a todos los partidos a través del tiempo.

Esto es como si a  nuestros hijos le permitiéramos faltar cuando tienen un examen en el colegio y  sería màs fácil no hacerse cargo.

Si a esto le sumamos que en los pasillos la negociación fue mantener a Martin Menem  al frente de diputados contra no dar quorum , esto ya  es demasiado porque lo que Milei criticaba pasó a ser parte de lo mismo.

Y que pasa cuando esto pasa, es como en un juicio cuando el abogado trata de mostrar que la persona x no es coherente con sus dichos entonces un jurado empieza a desconfiar de todo y esta semana lo que pasó que las redes y la gente salieron a criticar el acercamiento al kirchnerismo.

Si la especulación es tenerla en frente para ganarle y derrotarla es un argumento muy infantil, que no resiste mucha explicación salvo que lo que se critica es válido para los demás pero no para uno.

El controlar la inflación y  que algunos parámetros de la economía vayan bien en parte tiene que ver con la  credibilidad que generó Javier Milei con sus actitudes económicas.

Cual puede ser el peligro si se convierte en una persona no confiable? Que  pasa si las promesas económicas las da vuelta porque conviene electoralmente?

A veces las jugadas de ajedrez hay que pensarlas muy bien sobre todo sabiendo que en frente tenès a alguien con mucha experiencia en la rosca polìtica y que el tiro puede salir por la culata y proponer un proyecto nuevo ante la reacción de la gente puede ser hasta nocivo. 

Motrar que internamente la  tropa no responde y querer lavarse las manos, estamos a una altura que nadie creería que fuese así.

Ahora también como sociedad nos tendríamos que preguntar hasta cuando tienen la libertad de no respetar los mandatos o lo que dicen que es su pensamiento.

Este posible trato con el kirchnerismo puede hacer dudar si en el fondo no hubo un acuerdo donde el kirchnerismo se sacó a Alberto Fernández ,  a Sergio Massa de encima y Milei terminó haciendo el trabajo sucio como aparentemente pasa despedir gente de un Estado gigante, devaluar como lo hizo y acomodar los precios de combustibles y bienes y servicios. La prueba está a la vista de la queja de los brasileños que están en Buenos Aires a la espera de la final de la libertadores.

La política es el arte de lo posible, pero la mirada de la gente es la que va a tener el poder a la hora del voto.

El Gobierno confirmó que impulsarán una ley de Ficha Limpia tras el fracaso en el Congreso